La fitball es una pelota llena de aire de dimensiones variables muy utilizada en pilates, pero con numerosas aplicaciones en otros ámbitos.
Si hace poco te hablábamos del roller para pilates, hoy te vamos a desvelar todos los secretos de la fitball: una pelota de goma llena de aire de diversas dimensiones conocida desde hace mucho tiempo en pilates, pero con muchos beneficios en otros campos de nuestra vida diaria.
El fitball, o balón suizo como también se le conoce, es una pelota llena de aire y de grandes dimensiones que suelen oscilar entre los 35 y 85 centímetros de diámetro. Es muy utilizada frecuentemente los gimnasios como método de tonificación y fortalecimiento muscular, especialmente de los abdominales y zona lumbar, pero también en sesiones de rehabilitación con el fisioterapeuta.
Fitball, alivio y prevención de los dolores lumbares
La realización de ejercicios con el fitball ayudará a activar los músculos estabilizadores de la zona lumbar, por ejemplo, sentándonos encima de ella. Al ser un elemento inestable, nuestro cuerpo se va a ver obligado a mantener el equilibrio, haciendo que los músculos estabilizadores de la espalda se activen y trabajen.
La ciática, la artritis de la columna vertebral, la estenosis espinal u otras patologías causan dolores en la espalda que se pueden ver aliviados simplemente sentándose sobre una fitball. Aunque no se padezcan dolores lumbares, su uso será será una muy buena manera de prevenir su aparición.
Fortalece la musculatura corporal con tu fitball
El fitball nos servirá también para trabajar el resto de nuestra musculatura corporal, además de las lumbares, bien siendo utilizado como elemento principal, o bien como complemento. Así, podemos fortalecer el core, que está compuesto por los abdominales, lumbares, glúteos y músculos de la cadera. Descubre aquí ejercicios para fortalecer el core con tu fitball.
Pero también nos servirá para trabajar la musculatura de las piernas y nos ayudará a hacer sentadillas, con las que trabajaremos cuádriceps, glúteos e isquiotibiales de manera principal, además de involucrar en gran medida los músculos estabilizadores de la espalda.
Además de las sentadillas, también podemos realizar zancadas, apoyando la pierna trasera en la fitball.
Como ves, con la fitball podrás trabajar prácticamente todos los músculos de tu cuerpo. ¿Te animas a probarla?